Finalizan las campañas de espárrago y alcachofa
El Grupo AN comercializa ambos productos tanto en fresco como para industria
Hace unas semanas finalizaron las campañas de dos de los productos hortícolas con alto valor añadido del campo navarro: el espárrago y la alcachofa. El Grupo AN es una de las pocas empresas que comercializa Alcachofa de Tudela y Espárrago de Navarra tanto en fresco como en conserva, en ambos casos bajo los sellos de sus respectivas Indicaciones Geográficas Protegidas.
Las campañas de espárrago y alcachofa de este año han estado marcadas por varios factores, entre ellos un descenso de la superficie cultivada respecto a otros años y unas condiciones climáticas adversas. Estos factores han afectado a la producción, la calidad y los costes de recolección de ambos productos. La falta de precipitaciones durante todo el año y los inusuales cambios de temperatura han tenido un impacto negativo en el rendimiento por parcela, provocando una disminución en la cantidad de kilogramos recolectados, y han ocasionado que las campañas de recogida de estos cultivos finalizaran antes de lo habitual.
El clima adverso, con escasez de agua durante toda la campaña, ha afectado al calibre de los espárragos. Durante esta campaña, la sequía ha hecho que la tierra tenga menos reservas, ocasionando un importante descenso en el porcentaje de espárrago de calibre grueso y que, en general, los frutos hayan sido más finos en comparación con años anteriores. “Al ser un calibre menor, el espárrago pesa menos. Por ello, ha disminuido el rendimiento por parcela. Sin embargo, los costes de recolección y de producción han aumentado, ya que las unidades de espárrago que se recolectaban eran las mismas que en otras campañas, pero con una rentabilidad inferior”, explica Raquel Sesma, directora del Área de Fresco de Frutas y Hortalizas del Grupo AN.
Además del calibre, otra de las razones del descenso de kilos de espárragos producidos ha sido la fluctuación de la temperatura durante los últimos meses de la campaña. En abril hubo unas temperaturas inusualmente altas para la fecha hasta que a primeros de mayo bajaron bruscamente, generando un contraste que hizo que la planta produjera menos espárrago. Por ello, la campaña de recolección ha sido más corta, finalizando tres semanas antes de lo habitual.
Por su parte, la campaña de primavera de alcachofa comenzó el mes de marzo, cuando empezaron a subir las temperaturas, con una calidad del producto excepcional y un aprovechamiento alto para su comercialización en fresco. Además, este año la alcachofa no ha estado tan afectada por los dos principales problemas que la han perjudicado durante las últimas campañas: el pulgón y el taladro.
Con el paso de las semanas, al igual que en la campaña de espárrago, la alcachofa comenzó a sufrir mucho con el calor y la falta de agua que afectaron a la calidad del producto. “En el Centro Hortofrutícola de Tudela comenzamos la campaña en fresco trabajando en docenas, hasta que, debido al exceso de calor, la alcachofa vino menos prieta y con un poco más de pelo. Por esta razón, tuvimos que adelantar la decisión de pasar a trabajar el producto en kilos”, detalla Raquel Sesma.
Cuando el producto dejó de ser apto para la comercialización se siguió manteniendo el cultivo verde para destinar la alcachofa a fondos para industria, fase de la campaña que finalizará este mes de junio. Además, en estos momentos se inician tanto los contactos con las cooperativas para conocer sus previsiones para la siguiente campaña, como las labores de preparación de la planta de alcachofa, cumpliendo así los requisitos de la IGP Alcachofa de Tudela.
COMERCIALIZACIÓN DE ESPÁRRAGO
Este año, las campañas de comercialización de espárrago se han enfrentado a la falta de agua, las temperaturas altas y la situación económica. Aunque se ha registrado una disminución en el volumen de producción en fresco y en conserva, se ha mantenido el interés de los clientes y se ha buscado adaptarse a las circunstancias actuales. A pesar de las dificultades, el Espárrago de Navarra sigue siendo un producto valorado por su calidad y altamente demandado tanto por las principales cadenas de distribución como por el consumidor final.
Desde el Grupo AN se valora de forma positiva la campaña de comercialización del espárrago en fresco, que comenzó a finales de marzo con una muy buena aceptación que generó que todo el producto que salía de la línea de calibración se vendiese. Durante la campaña, la sequía ha provocado que se haya obtenido un espárrago con un menor peso y un calibre más pequeño que el habitual, reduciendo de este modo la producción por parcela.
Ante esta situación, la directora de Frutas y Hortalizas destaca: “A pesar de que la falta de agua ha hecho que el calibre haya sido menor, tenemos la sensación de que los clientes y los consumidores se han quedado con un buen sabor de boca. Han aceptado que esta campaña había escasez de calibres gruesos y han adaptado su consumo a otro tipo de calibres, primando el valor añadido y la extraordinaria calidad del Espárrago de Navarra que ofrecemos”.
La comercialización del espárrago en fresco del Grupo AN se realiza principalmente a nivel nacional, aunque hay un pequeño porcentaje de producto destinado a exportación que este año ha disminuido su volumen. En general, se ha obtenido un precio de comercialización en fresco mejor que en años anteriores, en parte debido a que la oferta de los espárragos de calibre grueso ha sido menor, lo que ha permitido incrementar su precio.
En cuanto al espárrago en conserva, la campaña ha sido complicada, con un 26 % menos de kilos que el año pasado. Rafa Castejón, director de Conservas Dantza, explica que el descenso se ha debido a la reducción de calibre y a los cambios climáticos que ocurrieron a partir de mayo: “El clima frío, las lluvias y, sobre todo, el viento frenaron la producción de espárrago en el campo. Como resultado, se produjo con una reducción significativa en la entrada de espárragos provocando un trabajo intermitente en la fábrica a finales de mayo”.
Sin embargo, la corta duración de la campaña no ha reducido el interés de las cadenas de distribución, siendo cada vez más las que apuestan por comercializar este producto de alto valor añadido en conserva. Por último, el consumo de Espárrago de Navarra de Conservas Dantza se centra principalmente en el mercado nacional, con un 95 % de las ventas dirigidas al consumo interno, aunque también se exporta a varios países, incluyendo Francia, Estados Unidos, Andorra, México, Reino Unido, Polonia, Bélgica e Italia.
LA ALCACHOFA EN EL MERCADO
La campaña de primavera de la Alcachofa de Tudela ha estado marcada por la disponibilidad de materia prima, los cambios climáticos adversos y la calidad del producto en el último tramo de la campaña. A pesar de ello, la comercialización de alcachofa ha logrado mantenerse gracias a su sabor y calidad diferenciados, así como a su buena posición en el mercado de productos de alto valor añadido.
Como en años anteriores, la comercialización en fresco comenzó realizándose por docenas. Luego, en función de la climatología, se cambió para fabricar en kilos. Este año, el cambio se ha producido antes debido a que las altas temperaturas y la escasez de precipitaciones afectaron al producto. “Normalmente, el consumo de alcachofas en docenas suele quedarse en la zona Norte de España. En cambio, cuando se realiza el cambio de producción por kilos las ventas y el consumo se extienden al resto de la geografía nacional”, explica Raquel Sesma.
El Grupo AN comercializa en fresco, además de en Navarra, en los mercados centrales de San Sebastián, Barcelona y Madrid, y a través de diferentes cadenas de distribución. En una campaña que comenzó y finalizó antes de lo habitual debido a los cambios bruscos en las temperaturas, los precios de comercialización de la alcachofa en fresco han sido buenos, gracias a los precios de la industria y a la escasez de alcachofa en otras comunidades autónomas, como por ejemplo en Murcia.
En el caso de la Alcachofa de Tudela en conserva, el director de Conservas Dantza detalla que “la fabricación en cuanto a kilos ha sido superior a años anteriores, pero la calidad de la materia prima ha sido inferior, lo que ha producido un rendimiento más bajo de lo esperado. Por ello, no hemos conseguido llegar a los programas de fabricación que teníamos establecidos”.
En general, la disponibilidad de materia prima ha sido compleja durante la campaña, tanto a nivel local como a nivel mundial, debido a malas campañas en diferentes regiones productoras de alcachofa. A pesar de la situación económica y la disminución en el volumen de producción en general, la Alcachofa de Tudela ha logrado mantener una buena posición en el mercado. Los consumidores de este producto de Conservas Dantza aprecian mucho su sabor y las diferencias organolépticas que lo distinguen de otras variedades presentes en el mercado.
Por otro lado, la conservera se enfoca en la producción de alcachofas naturales, lo que les proporciona una ventaja competitiva respecto a otras. “Dado nuestro origen cooperativo apostamos por el producto local y por las denominaciones de origen, que ofrecen un valor añadido y diferenciador”, apunta Rafa Castejón
En cuanto a la comercialización de la Alcachofa de Tudela en conserva, se destina principalmente al mercado nacional, aunque también se exporta a otros países como México, Andorra, Reino Unido y Francia.